Día Mundial de los Humedales: La importancia del Embalse de Orellana y Sierra de Pela para la vida natural

Como cada año, el 2 de febrero se celebra el Día Mundial de los Humedales (DMH) para conmemorar la fecha de la firma del Convenio de Ramsar, relativo a la conservación de estos ecosistemas, en la ciudad iraní de dicho nombre el 2 de febrero de 1971. El objetivo de esta efeméride es visibilizar y crear conciencia acerca del valor de los humedales para la humanidad y el planeta. Con este fin, cada año se selecciona un lema que ayuda a centrar la atención en alguno de sus valores y funciones esenciales. 

Junto con las lagunas de la Albuera, el embalse de Orellana y Sierra de Pela son las únicas zonas húmedas de Extremadura que pertenecen a la lista de humedales de importancia internacional establecidos en el Convenio de Ramsar, junto otros lugares tan renombrados como las Tablas de Daimiel, Doñana o el delta del Ebro. En 1989, esta zona se clasifica como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). En 1998, se incluye dentro de la Red Natura 2000 con la figura de Zona de Especial Conservación. Se pueden observar ejemplares de buitre leonado, águila real, aguilucho pálido, aguilucho cenizo, cigüeña negra y, además, existen animales de otros grupos como nutria, tejón y sapo corredor.

El lema escogido para el Día Mundial de los Humedales 2020, “Los humedales y la biodiversidad”, ha sido seleccionado para llamar la atención sobre el importante papel que juegan estos ecosistemas en el mantenimiento de la biodiversidad. Los humedales son ricos reservorios de biodiversidad. Algunas cifras que ayudan a entender hasta qué punto son hábitats importantes en este sentido son las siguientes:

  • Se estima que el 40 % de las especies vegetales y animales del planeta viven o se reproducen en zonas húmedas,
  • Hasta la fecha se han documentado más de  100.000 especies de agua dulce en los humedales de todo el planeta,
  • El 30 % de las especies de peces conocidas son de humedal, y cada año se descubren 200 especies nuevas de agua dulce,

La pérdida de biodiversidad en todo el planeta es un hecho sobre el que los datos científicos disponibles no dejan lugar a dudas. Las especies están disminuyendo más rápidamente que en ningún otro momento de la historia, el ritmo se acelera y el cambio climático lo empeora. La biodiversidad disminuye rápidamente, y las especies de los ecosistemas húmedos se están viendo especialmente afectadas por esta tendencia. Las cifras son sobrecogedoras:

  • Entre 1970 y 2012 las poblaciones de peces, aves, mamíferos, anfibios y reptiles de todo el mundo disminuyeron en un 58%,
  • Desde 1970 ha disminuido el 81 % de las especies de los humedales continentales y el 36 % de las especies de los humedales costeros y marinos 
  • El 25 % de las especies de los humedales están amenazadas de extinción; esto incluye a las aves acuáticas, los mamíferos dependientes del agua dulce, las tortugas marinas y las especies que construyen arrecifes de coral

¿Cómo podemos ayudar a detener esta pérdida de biodiversidad generalizada?. Restaurar, conservar y utilizar racionalmente los humedales es una de las maneras más eficaces. Es necesario tener claro que hay mucho que ganar manteniendo humedales saludables y restaurando los degradados. 

Como en ocasiones anteriores, la Secretaría del Convenio de Ramsar ha diseñado materiales específicos para esta efeméride (carteles, folletos divulgativos, guía para docentes y organizadores, Mapa Mundial de Eventos, etc.), que se encuentran disponibles en el sitio Web específicamente creado al efecto.