La nueva Ley de Restauración de la Naturaleza de la UE obligará a dar prioridad a las zonas de la Red Natura 2000
Según la UE, la Ley de Restauración de la Naturaleza, consensuada con los Estados miembros, “busca regenerar los ecosistemas degradados de sus territorios, contribuir a alcanzar los objetivos climáticos y de biodiversidad de la UE y mejorar la seguridad alimentaria”.
Bajo esta premisa, los Estados miembros han acordado restaurar al menos el 30 % de los hábitats contemplados en la nueva ley (desde bosques, pastizales y humedales hasta ríos, lagos y lechos coralinos) para que pasen de un estado deficiente a uno bueno en 2030, porcentaje que aumentará al 60 % en 2040 y al 90 % en 2050. De acuerdo con la posición del Parlamento, los países de la UE deben dar prioridad a las zonas de la Red Natura 2000 hasta 2030, por lo que el Embalse de Orellana y Sierra de Pela será zona prioritaria si se aprueba definitivamente la norma.
Cuando un área se encuentre en buenas condiciones, los países velarán por que no se deteriore de manera considerable. Los Estados miembros también tendrán que adoptar planes nacionales de restauración que detallen cómo pretenden alcanzar estos objetivos.
Ecosistemas agrícolas
Con vistas a mejorar la biodiversidad de los agroecosistemas, los países de la UE habrán de avanzar en dos de los tres indicadores siguientes: el índice de mariposas de los pastizales; la proporción de tierras agrícolas con características paisajísticas muy diversas, y las reservas de carbono orgánico en suelos minerales de tierras de cultivo. Además, deben tomarse medidas para aumentar el índice de aves comunes ligadas a medios agrarios, “ya que estos animales son buenos indicadores del estado general de la biodiversidad”, según indica la UE en un comunicado de prensa.
A petición del Parlamento, la ley incluye un “freno de emergencia” que permitirá suspender los objetivos para los agroecosistemas en circunstancias extraordinarias si merman en gran medida las tierras necesarias para una producción suficiente de alimentos para el consumo de la UE.
Por otro lado, la ley exige una evolución positiva de varios indicadores en los ecosistemas forestales y que se planten 3.000 millones de árboles más. Los Estados miembros también tendrán que convertir al menos 25.000 km de ríos en cauces libres, algo que podría afectar a las grandes presas del Guadiana de acuerdo con esta Ley, y garantizar que no se produzca una pérdida neta de la superficie nacional total de espacios verdes urbanos y de cubierta arbórea urbana.
Próximos pasos
El acuerdo alcanzado con los Estados miembros se adoptó con 329 votos a favor, 275 en contra y 24 abstenciones. Antes de publicarse en el Diario Oficial de la UE y entrar en vigor veinte días después, el Consejo de Europa debe dar el visto bueno.
Contexto
Según la UE, más del 80 % de los hábitats europeos están en mal estado. La Comisión propuso el 22 de junio de 2022 una Ley de Restauración de la Naturaleza para favorecer la recuperación a largo plazo de los ecosistemas terrestres y marinos deteriorados, alcanzar los objetivos climáticos y de biodiversidad de la UE y cumplir sus compromisos internacionales, en particular el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal. Según la Comisión, la nueva ley reportaría importantes beneficios económicos, ya que cada euro invertido se traduciría en al menos ocho euros de beneficios.
“Esta legislación responde a las expectativas de la ciudadanía en cuanto a la protección y restauración de la biodiversidad, el paisaje y los océanos, según se expresan en las propuestas 2(1), 2(3), 2(4) y 2(5) de las conclusiones de la Conferencia sobre el Futuro de Europa”.