Comienza la cuenta atrás para la concesión de las banderas azules de 2023

Hoy se han reunido en un taller por videoconferencia la mayoría de los responsables y técnicos municipales extremeños que concurrirán a este galardón, que llegaría a su décimo cuarta edición en el caso de la Playa Costa Dulce de Orellana la Vieja.

Un taller en el que ha participado el director general de Turismo, Francisco Martín Simón, junto con el presidente de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor, José Palacios Aguilar, además de alcaldes, tenientes de alcalde y técnicos de los ayuntamientos de Acebo; Alange; Campanario; Cañamero; Casas de Don Pedro; Castuera; Cheles; Herrera del Duque; La Granja; Moraleja; Navaconcejo; Orellana de la Sierra; Talarrubias y Villanueva del Fresno, según comunica la Junta en nota de prensa.

En concreto, se trata de un taller online de cumplimentación de candidaturas a bandera azul en 2023 celebrado este jueves, en donde el titular de Turismo ha recordado que las ocho banderas logradas el verano pasado han proyectado el destino Extremadura dentro y fuera de España.

“Estas marcas de calidad se consiguen con perseverancia e inversiones. Hay que creérselo y pelear por ellas. Son una apuesta a medio plazo que nos ayudan a posicionar Extremadura en el mercado nacional e internacional. Orellana la Vieja y Cheles, las primeras localidades que lograron banderas azules en la región, son hoy destinos de excelencia turística, con muchos puestos de trabajo y que dinamizan las zonas rurales”, ha indicado Francisco Martín, que ha agradecido el trabajo y la implicación de ADEAC, las entidades públicas y las empresas en la consecución de estos objetivos, al tiempo que ha invitado a los responsables de cada municipio al II Congreso Ibérico Bandera Azul en Playas Continentales, que se celebrará en abril de 2023 en la localidad portuguesa de Lousã.

Turismo, según ha anunciado, abrirá el próximo año una línea de ayudas a los ayuntamientos con bandera azul en el ámbito de las Acciones de Cohesión al Destino, con el propósito de convertir esas zonas de baño en espacios de excelencia turística. Estas ayudas se dirigen a actuaciones como la mejora de la calidad del agua y de las instalaciones, la accesibilidad o la creación de espacios gastronómicos y de refugios climáticos (aumento de la masa arbórea y otras medidas).