Confederación defiende que los desembalses que se vienen realizando se ajustan a los acuerdos de la Comisión de Desembalse
“Los desembalses que se vienen realizando en la presa de Cijara se ajustan a los acuerdos adoptados por la Comisión de Desembalse”, es lo que defiende la Confederación Hidrográfica del Guadiana en un comunicado hecho público a raíz de las recientes quejas por parte de los vecinos que viven cerca de este embalse y que estaban relacionando erróneamente ese trasvase de agua con la Bandera Azul de Orellana.
De hecho, en el texto hecho público por parte de la institución dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, se enmarca que la propuesta de actuación aprobada por la Comisión de Desembalse para la zona Occidental de la cuenca del Guadiana establece la realización de los desembalses precisos para atender las dotaciones concesionales de 160.000 ha de riego correspondiente a zonas regables oficiales (Centro de Extremadura, Zujar, Orellana, Montijo y Lobón) o a riegos de iniciativa privada (tomas directas de los ríos).
Estos desembalses se han repartido entre los diversos embalses del sistema general de regulación con un criterio de equilibrio entre sistemas y atendiendo a las particularidades de cada embalse (limitaciones por las cotas de las tomas de los canales de riego, abastecimientos y otras causas).
“Antes de atender la demanda de riego, en todos los embalses se han definido unos niveles mínimos de explotación para garantizar los caudales ecológicos; los abastecimientos (uso prioritario del agua); y unas condiciones ambientales básicas”, sostiene la Confederación.
Añade el organismo, que en lo que respecta a los aprovechamientos hidroeléctricos, “estos constituyen un uso complementario al regadío, y totalmente supeditado al mismo. Los turbinados para producción de energía hidroeléctrica en estas presas no consumen recurso hidráulico y solo se realizan cuando las presas desembalsan para atender las necesidades de la campaña de riegos”.